Real Sporting de Gijón

Entrenador: Manolo Preciado (4-2-3-1)

Portero: Juan Pablo e Iván Cuéllar
Lateral derecho: Rafel Sastre, Pedro y Pedro Orfila (*)
Lateral izquierdo: Roberto Canella y José Ángel
Centrales: Grégory Arnolin, Alberto Botía, Iván Hernández, Gerard Autet y Alain (*)
Pivotes: Diego Camacho, Míchel, Sergio Matabuena, Alberto Lora, Andreu Guerao y Marcos Landeira (*)
Extremo derecho: Luis Morán, Miguel De las Cuevas, Fco. José Maldonado y Pablo Acebal (*)
Mediapunta: Carmelo González, Alberto Rivera y Kike Mateo
Extremo izquierdo: Diego Castro
Delantero centro: Mate Bilic y David Barral

(*) Jugadores del filial

Altas: A. Rivera (Real Betis), Juan Pablo (CD Numancia), Grégory (Vitoria Guimaraes), Miguel De las Cuevas (Atlético de Madrid) y Alberto Botía (cesión/Barça Atlètic).

Bajas: Iñaki Lafuente (CD Numancia), Raúl Cámara (Recreativo de Huelva), Neru (Alavés), Omar (Málaga CF), Jürgen Colin (libre), Sergio Sánchez (libre) y Jorge García Torre (cesión/Gimnàstic de Tarragona).

Prescindibles: Andreu.

Interesan: Lateral derecho (Juan Valera)

Lo reconozco, tengo una simpatía especial por el Sporting desde niño y me alegró profundamente que lograra la permanéncia. Más aún porque lo veía muy negro desde antes de empezar la temporada de su esperado regreso a Primera. Las cosas no han cambiado mucho este verano y lo más normal es que toque volver a sufrir hasta el último minuto. La sportinguista es una plantilla básicamente nacional y de un perfil más bien humilde. La prueba es que de los jugadores que causan baja ninguno ha encontrado acomodo en otro equipo de la Liga BBVA e incluso dos de ellos siguen sin equipo. En este sentido, el trabajo de Manolo Preciado hasta ahora ha sido encomiable. No sólo ha logrado el objetivo de mantenerse sino que lo ha hecho con una apuesta por el fútbol ofensivo, lo cual le costó algún disgusto en forma de goleada pero no deja de ser valiente. Al finalizar el curso 2008/09 el Sporting era el equipo con menos empates de la categoría (sólo 1) y con más derrotas (23, empatado con el descendido Numancia), pero también había logrado 14 triunfos (sólo 1 menos que un Málaga que rozó puestos europeos).

Y es que al contrario de lo que sucede con la mayoría de los equipos destinados a la zona baja, el problema del Sporting no es la falta de gol si no la fragilidad defensiva. Éste es el punto que se deberá corregir si se quiere aspirar a una mayor tranquilidad clasificatória. Para ello han fichado un buen portero como Juan Pablo para meter presión al irregular Pichu Cuéllar, al central francés Grégory y han logrado la cesión de Alberto Botía. El murciano es una firme promesa de la cantera barcelonista pero se caracteriza más por su calidad en la salida del balón que por ser un bastión defensivo, aunque eso puede compensarlo su hambre por debutar en Primera. En realidad, por lo visto en una pretemporada caracterizada por los empates a cero los dos nuevos apuntan a titulares con Iván Hernández y Gerard Autet como alternativas. Puede ser una mejora. Lo que sigue sin resolverse es el problema del lateral derecho, dónde sólo está el veterano y discutido Rafael Sastre. Ya se hicieron experimentos la temporada pasada situando a Raúl Cámara en esa posición y este verano han continuado experimentando con Pedro Santa Cecíla, ambos centrocampistas. Como el club no ha encontrado en el mercado nada asequible que le guste para ese puesto, Preciado está dando oportunidades a Pedro Orfila del filial. Irónicamente, el lateral izquierdo lo tienen más que cubierto con dos yogurines de Mareo muy cotizados.

Con la escasez de laterales izquierdos que azota a todo el fútbol europeo, convirtiéndo esa posición en una de las más difíciles de cubrir y en la que cada vez más se sitúa a centrales o centrocampistas reconvertidos, al Sporting le han salido dos laterales zurdos con una proyección increíble. Tanto es así, que a punto han estado de traspasar a Roberto Canella al Real Zaragoza para dar la titularidad a José Ángel. Al final se frustró la operación por la dudosa liquidez del conjunto maño, con lo que no sería extraño que si se queda Canella les veamos jugar juntos. Ya sea con uno de ellos en labores ofensivas (Diego Castro no tiene recambios naturales) o con José Ángel de lateral derecho. Incluso me resulta extraño que sólo el Zaragoza haya mostrado un interés oficial por Canella, habiendose rumoreado tantas nóvias para él.

Otro producto de la cantera gijonesa que ha tenido un pié fuera es Míchel. El Birmingham estuvo a punto de llevarse al mediocentro a la Premier, pero con el fichaje de Barry Ferguson ese interés parece haberse enfriado definitivamente. En todo caso el Sporting, que a menudo ha malvendido a sus promesas, este verano ha sabido ser firme con sus exigéncias económicas. Y hace bien, porque es evidente que le hace falta vender pero no a cualquier precio. Tanto Canella como Míchel pueden seguir creciendo en este equipo y revalorizarse de cara a una futura venta. Por mucho que el asturiano sea un club de formación y vendedor había que detener esa contínua diáspora de talentos que durante los años de exílio en Segunda se llevó al extremo y que impidió que jugadores como David Villa, Pablo Amo, Sergio Fernández, Pablo Álvarez o Javi Fuego dieran más al club. Hablando de yogurines, los seis canteranos que han participado esta pretemporada con Preciado han sido el portero Raúl, el mencionado Pedro Orfila, el defensa Alain, el mediocentro Marcos Landeira, el extremo derecho Pablo Acebal y el menudo delantero Carlinos. Veremos si alguno de ellos logra seguir los pasos de José Ángel y Lora, ya miembros de pleno derecho del primer equipo.

El único jugador que no cuenta para nada es Andreu. El mediocentro catalán tiene una innegable calidad pero sus contínuas lesiones musculares le convierten en un lastre para el club. Le queda un año de contrato y se le está buscando una salida pero la falta de ofertas le puede hacer permanecer en la plantilla porque tampoco hay un exceso de fichas federativas. Su puesto está bien cubierto con Míchel o Lora, que aportarán creatividad al doble pivote junto a Matabuena o Camacho, dos perros de presa.

En los últimos tres cuartos de campo es interesante la incorporación de Miguel De las Cuevas, prometedor extremo que apenas ha tenido oportunidades en el Atlético y que llega traspasado a muy bajo coste en una cesión encubierta (el Atleti le puede recuperar los tres próximos años). De las Cuevas, que puede jugar en las dos bandas, competirá con Luis Morán y podría dar descanso al indiscutible Diego Castro. A Maldonado apenas le tengo en cuenta porque ya són 5 años sin confirmar lo bueno que apuntó en el Lorca y le doy por definitivamente por perdido. En la media punta la buena noticia del curso pasado fué el canario Carmelo, que ahora está lesionado pero volverá a ser clave en el juego de ataque sportinguista. Cuando él no esté, Rivera y Kike Mateo son recambios de garantías pero sin tanto gol. En punta sigue habiendo poca cosa pero funcionó de lujo la temporada pasada. Me sorprendió el gran rendimiento ofrecido por el croata Mate Bilic, con sus 12 goles, y cuando él no estuvo David Barral metió otros 10. El futuro del equipo depende en gran parte de si serán capaces de repetir esos registros o incluso aumentarlos.